Última actualización:
Líneas generales
La acumulación incontrolada de basura es insalubre y favorece las enfermedades transmitidas por roedores e insectos.
Dado que la mayor parte de los residuos que generan las personas de la competencia del ACNUR son orgánicos, no se suelen considerar un problema: el tema tiende a ignorarse, pese a que el volumen y el peso de las basuras de los hogares y los mercados puede ser elevado e incluir materia inorgánica como envases, latas o plásticos.
Al inicio de una emergencia, la higiene y la eliminación de residuos suelen ser deficientes, de manera que los parásitos y otras plagas, incluidos los roedores, proliferan con rapidez.
Si los alimentos se distribuyen a los refugiados en latas metálicas, debe prestarse una atención especial a su eliminación, y no solo por razones estéticas sino también porque representan un peligro para la salud (pueden herir a los niños, ofrecer un lugar para que se reproduzcan los mosquitos, etc.). Además, las latas no son biodegradables.
Los residuos médicos que generan los centros de salud también son peligrosos (las jeringuillas y agujas utilizadas, vendajes contaminados, especies de laboratorio, etc.). El acceso a los servicios médico-sanitarios debe estar bien controlado y los residuos se deben tratar por separado y sin demora.
Se deben establecer rutinas para el almacenamiento, la recogida y la eliminación de las basuras. Esto resulta particularmente importante en emplazamientos con una alta densidad de población.
La gestión de residuos sólidos es una responsabilidad conjunta de los encargados de la coordinación sobre el terreno (coordinación y gestión de campamentos), así como de los sectores WASH y sanitario. En entornos urbanos y fuera de los campamentos, se deben utilizar y, si es necesario, fortalecer los sistemas nacionales.
Dado que la mayor parte de los residuos que generan las personas de la competencia del ACNUR son orgánicos, no se suelen considerar un problema: el tema tiende a ignorarse, pese a que el volumen y el peso de las basuras de los hogares y los mercados puede ser elevado e incluir materia inorgánica como envases, latas o plásticos.
Al inicio de una emergencia, la higiene y la eliminación de residuos suelen ser deficientes, de manera que los parásitos y otras plagas, incluidos los roedores, proliferan con rapidez.
Si los alimentos se distribuyen a los refugiados en latas metálicas, debe prestarse una atención especial a su eliminación, y no solo por razones estéticas sino también porque representan un peligro para la salud (pueden herir a los niños, ofrecer un lugar para que se reproduzcan los mosquitos, etc.). Además, las latas no son biodegradables.
Los residuos médicos que generan los centros de salud también son peligrosos (las jeringuillas y agujas utilizadas, vendajes contaminados, especies de laboratorio, etc.). El acceso a los servicios médico-sanitarios debe estar bien controlado y los residuos se deben tratar por separado y sin demora.
Se deben establecer rutinas para el almacenamiento, la recogida y la eliminación de las basuras. Esto resulta particularmente importante en emplazamientos con una alta densidad de población.
La gestión de residuos sólidos es una responsabilidad conjunta de los encargados de la coordinación sobre el terreno (coordinación y gestión de campamentos), así como de los sectores WASH y sanitario. En entornos urbanos y fuera de los campamentos, se deben utilizar y, si es necesario, fortalecer los sistemas nacionales.
Guía principal
Normas de emergencia
- Almacenamiento. Se debe proporcionar un contenedor (de 100 litros) por cada 10 familias. A menudo se utilizan bidones de 200 litros cortados por la mitad. Si es posible, los contenedores deben tener tapa y orificios de drenaje en su parte inferior. Los contenedores se deben colocar por todo el emplazamiento a una distancia máxima de 15 m de cada vivienda. No resulta económico ni práctico utilizar cubos de cemento: resultan difíciles de vaciar, favorecen la proliferación de roedores y dispersan la basura por la zona.
- Recogida y transporte. Las basuras se deben recoger periódicamente (como mínimo dos veces por semana) de los contenedores en los que se depositan. Los campamentos ubicados cerca de una ciudad pueden beneficiarse de los servicios locales de recogida de basuras. Resulta muy oneroso utilizar tractores con remolques, por lo que debe ser la última opción que se debe considerar y únicamente ha de recurrirse a ella en campamentos extensos y densamente poblados. Las carretillas o los carros tirados manualmente o por animales son, por lo general, más apropiados.
- Frecuencia de la recogida. El personal del ACNUR desplegado sobre el terreno y sus asociados deben asegurarse de que los puntos de recogida de residuos domésticos, médicos, comerciales y de los mercados se vacíen al menos dos veces por semana (o con una frecuencia mayor, si es necesario). Este constituye un requisito esencial para romper los ciclos de reproducción de las moscas y garantizar que los residuos no se descompongan y se conviertan en una molestia.
- Residuos de los mercados. El personal del ACNUR desplegado sobre el terreno y sus asociados deben cerciorarse de que los residuos generados por los mercados se recojan y gestionen de un modo eficiente, higiénico y en el momento oportuno. Puede ser necesario establecer mecanismos especiales para los residuos de los mataderos y las pescaderías.
- Sustancias peligrosas. Las baterías de ácido de plomo, las pinturas y aceites usados y el material eléctrico estropeado pueden plantear riesgos graves para la salud pública y el medio ambiente, incluso en pequeñas cantidades. En todo tipo de contextos, el personal del ACNUR desplegado sobre el terreno y sus asociados deben disponer la recogida de estos residuos por separado. Priorice aquellas intervenciones que eviten que entren sustancias peligrosas en la corriente de residuos domésticos frente a la gestión de residuos domésticos relativamente inertes.
- Residuos médicos. Los socios del ACNUR pertenecientes al sector sanitario deben asegurarse de que todos los residuos médicos sean recogidos, manipulados, tratados y eliminados con el menor riesgo posible para el personal sanitario, el personal encargado de la gestión de residuos y las personas de la competencia del ACNUR. Todos los residuos infecciosos, no infecciosos, puntiagudos y peligrosos deben gestionarse cumpliendo estrictamente los protocolos nacionales y (en ausencia de estos) los protocolos mundiales de la OMS. El transporte de residuos crea riesgos adicionales; por lo tanto, se recomienda vivamente que los residuos médicos se gestionen y eliminen in situ utilizando métodos sencillos.
Norma a más largo plazo
Las normas aplicables son las mismas tanto en situaciones de emergencia de corta y larga duración.Enlaces
UNHCR, WASH Manual, 2020
OMS/WEDC Technical note no. 7: Solid waste management in emergencies (2013)
OMS: Overview of technologies for the treatment of infectious and sharp waste f…
OMS: Manejo seguro de residuos de establecimientos de salud (2014)
Proyecto Esfera, Manual Esfera
OMS: Management of wastes from immunisation campaign activities (2004)
MSF: Public Health Engineering in precarious situations (2010)
Contactos principales
Póngase en contacto con la División de Resiliencia y Soluciones/Dependencia WASH. Dirección: [email protected].
En esta sección:
Háganos llegar su opinión
Háganos saber su opinión sobre el nuevo sitio y ayúdenos a mejorar su experiencia de usuario...
Háganos llegar su opinión
Háganos saber su opinión sobre el nuevo sitio y ayúdenos a mejorar su experiencia de usuario...
Ayúdanos a mantener el manual actualizado
Sugerir una mejora para esta página